DE LAS VACAS DE LA INDIA Y DE LAS ARCAS MUNICIPALES

No sé que van a poder cumplir los candidatos a munícipe de lo mucho que están prometiendo en esta campaña electoral. Porque los Ayuntamientos, que ya lo están, van a seguir “caninos”, y las ubres del Estado parecen de vaca hindú.

Los ingresos, ahora y a partir de ahora, son (van a ser) habas contadas.  Por cierto, el haba siempre fue un alimento funerario y de mal presagio. En Egipto, los campos de habas eran la antesala del inframundo, aunque para los griegos mejoró la cosa del haba: las lanzaban en las bodas convencidos que servirían para engendrar hijos varones. Tal vez por ello San Clemente prohibió su consumo por el “cosquilleo genital” que producía. Total, que las habas terminaron en los ritos masónicos y fueron elemento de sufragio: habas contada.

En fin; volvamos al dinero de los Ayuntamientos y a la cuestión del empleo que ahora todos prometen.

Antes de creérselo, recuerde que el Ayuntamiento en sí no ha podido remediar lo del empleo ni en 2008, ni en 2009, ni en 2010… ni lo va a poder hacer ahora. El Ayuntamiento tiene lo que tiene; y una buena parte se lo debe el Estado. Por cierto, el Estado entró en liza, a través del Gobierno, y con el pretexto de generar empleo se ha “pulido” ya una fortuna irrecuperable de más de trece mil millones de euros (5.000 en el año 2010)  y… visto lo visto me recuerda el Plan E lo de las vacas de la India: estar, están; pero -aparentemente- no sirven/no han servido “p’a ná de ná”.

El Bos Indicus pululante no puede ser sacrificado, apenas da leche y su producción de estiércol (para fertilizante o combustión) es raquítica. ¿Para qué coño lo mantienen? Pues… porque la vaca es una divinidad; es uno de los ejes del hinduismo… y la India tiene una de las mayores poblaciones de vacunos del mundo: del orden de los 195 millones de cabezas. Y como el Plan E; ¿”p’a qué”?

El no comer carne de vaca tiene una explicación científica (Marvin Harris, 1985): “Si los animales consumen cereales, y los hombres consumen esos animales, se pierden 9 de cada 10 calorías y 4 de cada 5 gramos de proteínas”. Y la India no está, ni estuvo nunca, para perder nada. Como conclusión sobre esa actitud el antropólogo yankee establecía que: “la vaca en la India es más valiosa pariendo bueyes, que se emplean en la agricultura, que asándose a la parrilla”. Hablamos de una extraña sociedad de economía agraria de baja industrialización que convive con una emergente economía hipercapitalista que… del dicho al hecho deja el trecho de 3.600 mataderos de reses oficiales y ¡¡unos 45.000 clandestinos por todo el país!! Vamos, que comen vaca.

Y nosotros, como siga esto, ¿qué comemos? Porque las casi 31.000 vallas publicitando las obras del Plan E (1 y 2), a 1.500 € por valla, son un sembrado que no produce más que urticaria en la vista. Es sonado el caso de las 3 farolas de Estepa de San Juan (pueblo soriano de 9 vecinos), por importe de 973 € (a los que sumar los 1.500 de la valla famosa) y que dio trabajo por espacio de 36 horas a gentes de un pueblo vecino.

Provoca algún sarpullido ver en qué se ha gastado el dinero de ese plan de empleo (en realidad, 2 planes: el 1 y el 2) -“un espacio de meditación en el cementerio de Pedreguer (Alicante)”- o irritación supina saber que ese dinero ha ido para “un mapa de España en la Plaza Calvo Sotelo de Alicante, tallado sobre ámbar flameado de Granada”.  No remedia leer el objeto de los proyectos: aceras en viales, nichos en cementerios, rehabilitar una cerca medieval, arbolitos en avenidas, carriles bici, más arreglos de vías y más aceras… y la crisis no ha escampado. Decían que eran medidas Keynesianas… para sonrojo de John Maynadr Keynes y como si ésta fuera la crisis de 1929. Ahora resulta que hay fuerza productiva de sobra y los mercados están rebosantes: aún no se llega a consumir la producción. Entonces, años 30, no había tanta fuerza productiva, pero sí se podía producir: y se produjo.

Y en el despilfarro para nado o menos sólo he mentado los 13.000 millones comprometidos  del Plan E (1 y 2); que luego están los 1.233 del cheque bebé (490.000 familias con 2.500 €), los 8.500 millones en emisiones de bonos, los 200 millones del Renove de coches, los 200 millones del Renove del turismo y los 20.000 millones del insostenible Fondo de Economía Sostenible para que, entre otras cosas, se pudiera acceder a un crédito, al que no se ha podido acceder, o invertir en energías renovables que por cada puesto que genera, destruye 2’2 en el resto de sectores (Informe del Instituto Juan de Mariana).

Y para cerrar con otro informe: hay uno, del Instituto de Estudios Económicos, que dice que sin las medidas estas “el déficit público hubiera sido la mitad y en estos momentos estaría corregido”, como ha ocurrido en Francia o Alemania. Y lo malo es que esto mismo lo llevan diciendo en el IEE desde enero de 2009 por la sencilla razón de que “el gasto público que se invierte (se ha invertido) es financiado por los propios ciudadanos a través de impuestos y futuras rebajas de prestaciones”.

Y esto… ¿se vota o no el 22M?